-Las Fuerzas Especiales de Guatemala refuerzan la vigilancia en la frontera para evitar la extensión de la criminalidad-
INTERNACIONAL.- El Ejército guatemalteco ha intensificado su presencia en la frontera con México, desplegando a sus temidos Kaibiles y la Policía Nacional para evitar la expansión de los grupos criminales mexicanos en su territorio. Durante la última semana, lo que antes eran “cruces libres” se han convertido en puntos de revisión minuciosa, con hasta 100 elementos desplegados en las áreas más críticas.
Las autoridades guatemaltecas han establecido un riguroso control fronterizo, prohibiendo la entrada y salida entre las 19:00 y las 05:00 horas. “Esa es la hora en la que estamos más alertas, porque han querido ingresar, pero cuando ven el dispositivo mejor se alejan. Nosotros tenemos órdenes de ser letales con los delincuentes”, afirmó un mando militar.
Gilbert López, propietario de la Tienda Pérez, ubicada en la última localidad guatemalteca antes de México, explicó cómo la violencia en Chiapas ha afectado la economía local, transformando prósperos pueblos fronterizos en lugares desolados. “Hace dos años, los guatemaltecos preferían hacer sus compras en Amatenango en lugar de Huehuetenango, pero ahora la violencia ha paralizado todo”, señaló.
Los sonidos de las balaceras nocturnas provenientes de Amatenango, Chiapas, son constantes. López comentó: “Aquí están las balaceras todas las noches. A veces nos cortan la luz desde allá, pero nuestro Ejército y Policía nos están cuidando”.
Los Kaibiles y la Policía Nacional han establecido retenes en puntos anteriormente libres, revisando minuciosamente vehículos y solicitando identificaciones para controlar quién entra y sale del país. “Estamos muy pendientes de quién entra, hasta ahora no hemos tenido situaciones de emergencia o arrestos, pero seguimos vigilantes”, afirmó un militar de las Fuerzas Especiales.
Los Kaibiles, conocidos como la Élite del Miedo, son temidos por sus operaciones especiales e inteligencia. Actualmente, se enfocan en operaciones contra la delincuencia terrorista y los cárteles mexicanos.
En un sobrevuelo realizado por MILENIO, se observó un retén del Ejército mexicano a más de 5 kilómetros de la frontera en Amatenango, Chiapas. Este cruce ha visto a decenas de familias mexicanas abandonar sus hogares, bienes y animales, buscando refugio en la zona serrana de Guatemala debido a la violencia.
Audilio Roblero, alcalde de Cuilco, señaló que los mexicanos refugiados continúan recibiendo amenazas de criminales a través de sus teléfonos, lo que ha llevado a su gobierno a solicitar a la federación un refuerzo de seguridad en fronteras y caminos. “Hay mucha guerra, así que señor Presidente de México, mande sus patrullas para controlar, porque no queremos lo que está pasando”, pidió López.
Mientras tanto, Guatemala sigue proporcionando alimento, cobijo y seguridad a los mexicanos que huyen de la violencia, enfrentando una realidad donde la seguridad y el retorno seguro a sus hogares en México es aún incierto.