-El hijo de AMLO busca consolidar el proyecto de Morena sin ocupar un puesto en el Gobierno-
Ciudad de México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó este lunes que su hijo, Andrés Manuel López Beltrán, conocido como “Andy”, se involucrará activamente en la política al concluir el mandato de su padre. El hijo de AMLO tiene como objetivo ayudar a consolidar el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), fundado por el propio mandatario.
Durante su conferencia matutina, López Obrador destacó que mientras sus otros hijos, José Ramón y Gonzalo, no tendrán participación en el Gobierno, el hijo de AMLO sí lo hará, pero exclusivamente dentro de las filas de Morena. “Andrés quiere participar en Morena, no voy a influir en nada, pero él sí quiere ayudar a consolidar el partido”, declaró el mandatario.
El fin de semana surgieron especulaciones sobre la posibilidad de que el hijo de AMLO busque un puesto dentro de la dirigencia de Morena en Tabasco, su estado natal. Sin embargo, el presidente desestimó estas versiones al señalar que su hijo no tiene intención de buscar ese cargo, pero sí aspira a un puesto donde pueda ser electo y no impuesto.
“Él va a buscar un cargo, pero donde la gente pueda elegirlo”, subrayó López Obrador, reafirmando que durante su mandato había establecido un acuerdo con sus hijos para no participar en el Gobierno. Con la conclusión de su administración el próximo 30 de septiembre, el camino queda libre para que “Andy” pueda asumir un rol político.
El presidente fue enfático al defender a su familia de las acusaciones de corrupción que han surgido durante su sexenio, calificándolas de “calumnias” y señalando que sus hijos nunca han estado involucrados en ningún escándalo de este tipo. “Nunca han estado envueltos en escándalos de corrupción, puros inventos de farsantes y calumniadores”, expresó.
Andrés Manuel López Beltrán, el hijo de AMLO, ha sido una figura clave dentro de Morena desde sus inicios. Participó activamente en la campaña de 2018 que llevó a su padre a la presidencia, particularmente en la coordinación de las acciones del partido en la Ciudad de México y el Estado de México.
El presidente cerró su intervención recordando que en 20 días se retirará de la vida política, dejando “un testamento hacia adelante” que permitirá que sus hijos, si así lo desean, puedan participar libremente en la política mexicana.