-La Casa Blanca insta a Israel a proteger a los civiles mientras la ONU y la UE piden una investigación exhaustiva-
Rafah.- Condenas internacionales a Israel por un bombardeo que, según las autoridades de Gaza, mató a 45 personas en un campo de desplazados en Rafah, en el sur del enclave palestino, gobernado por el movimiento islamista Hamas. Este ataque es parte de la ofensiva que Israel ha mantenido contra Hamas desde hace más de siete meses, en respuesta a un mortífero ataque llevado a cabo por comandos islamistas en suelo israelí el 7 de octubre.
Israel declaró que está investigando el “grave” bombardeo en Gaza del domingo por la noche, que dejó víctimas civiles. Según el ejército israelí, el ataque tenía como objetivo a milicianos de Hamas y resultó en la muerte de dos altos cargos del grupo islamista. La Casa Blanca instó al gobierno israelí a tomar todas las precauciones para proteger a los civiles tras las “imágenes devastadoras” del ataque en Rafah. Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional declaró: “Israel tiene derecho a ir tras Hamas, pero debe tomar todas las precauciones posibles para proteger a los civiles”. Además, mencionó que están en contacto con las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para evaluar lo sucedido, y se entiende que las FDI están llevando a cabo una investigación.
Las condenas internacionales no se hicieron esperar. La Organización de Naciones Unidas (ONU) pidió a Israel realizar una investigación “exhaustiva y transparente” sobre el bombardeo. Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, exigió el cese de las operaciones militares y el respeto al derecho internacional. El jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, se declaró “horrorizado por las noticias que llegan de Rafah sobre los ataques israelíes que mataron a docenas de desplazados, incluidos niños”.
El bombardeo provocó un incendio en el campo de desplazados en el noroeste de Rafah, según la agencia de defensa civil de Gaza. Mohamed al Mughayyir, funcionario de la agencia, describió la escena como “cuerpos carbonizados” y “niños, mujeres y ancianos heridos”. Testigos informaron que el bombardeo ocurrió después de que Hamas disparó ocho cohetes contra Tel Aviv y otras áreas de Israel, los cuales fueron interceptados por las defensas aéreas israelíes sin causar víctimas. Las imágenes difundidas por la Media Luna Roja Palestina mostraron escenas caóticas de personal médico evacuando a heridos, incluidos niños. El Comité Internacional de la Cruz Roja reportó una afluencia de heridos en su hospital de campaña en busca de atención por lesiones y quemaduras.
Las condenas internacionales también llegaron de varios países de la región. Egipto denunció un “ataque contra civiles indefensos”, Jordania acusó a Israel de cometer “crímenes de guerra” y Arabia Saudita condenó “las continuas masacres cometidas por las fuerzas de ocupación israelíes”. Turquía prometió hacer “todo lo posible para que estos bárbaros y asesinos rindan cuentas”.
La guerra comenzó el 7 de octubre cuando comandos islamistas mataron a más de 1,170 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel. Los milicianos también secuestraron a 252 personas, de las cuales Israel afirma que 121 permanecen cautivas en Gaza. En respuesta, Israel lanzó una ofensiva contra Gaza, que ha dejado 36,050 muertos, en su mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Salud gazatí. Naciones Unidas ha advertido que el territorio palestino está amenazado por una inminente hambruna.
España, Irlanda y Noruega planean reconocer formalmente a Palestina como Estado este martes, un paso que ya han dado más de 140 miembros de la ONU, aunque pocas potencias occidentales han seguido este camino.
