Ciudad de México.- Con 338 votos a favor y 126 en contra, la Cámara de Diputados aprobó las reformas a la Ley de Amparo, con el objetivo de armonizarla con los recientes cambios constitucionales al Poder Judicial avalados en septiembre pasado por el Congreso de la Unión y las legislaturas estatales.
Tras el rechazo de todas las reservas presentadas, el decreto fue turnado al Ejecutivo para su publicación y posterior entrada en vigor.
¿Qué implica esta reforma?
Uno de los puntos más polémicos de la modificación es que las sentencias de juicios de amparo por inconstitucionalidad de normas generales ya no tendrán efectos generales, sino que únicamente protegerán a quienes hayan promovido el recurso legal.
Este cambio ha sido señalado por la oposición como una restricción al acceso a la justicia, ya que solo beneficiaría a quienes tengan los recursos económicos para interponer un amparo.
Posturas encontradas en el debate legislativo
El debate en el pleno estuvo marcado por las críticas de los partidos opositores.
La diputada Margarita Zavala (PAN) acusó a Morena de beneficiar a los sectores con mayores recursos:
“Los que dicen defender a los pobres en realidad favorecen a los ricos que pueden pagar un abogado. Hoy están entregando el Poder Judicial a estos abogados boutique a los que tanto critican, pero que tanto obedecen”, señaló.
Por su parte, el legislador Arturo Yáñez (PRI) advirtió que la reforma limita el derecho de amparo solo a quienes puedan costearlo:
“El que tenga dinero podrá ampararse y obtener una resolución favorable, pero los que no, quedarán en el desamparo total.”
Desde Movimiento Ciudadano, Laura Ballesteros acusó a Morena de intentar someter al Poder Judicial a los intereses del gobierno:
“Su trabajo es proteger a la gente, no al gobierno todopoderoso. Como dice la canción de Molotov: ‘Si le das más poder al poder, más duro te van a…’ Y ustedes ya saben lo que sigue.”
Morena defiende la reforma
Desde la bancada oficialista, el diputado Julio César Moreno (Morena) defendió los cambios a la Ley de Amparo, asegurando que buscan democratizar la justicia y evitar que solo sea un recurso para unos cuantos:
“La reforma no es solo una reestructuración institucional, sino un esfuerzo por hacer que la justicia sirva realmente a quienes más la necesitan y que los procesos sean más ágiles y eficientes.”
Otros cambios en el Poder Judicial
La reforma también establece modificaciones en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que a partir de ahora sesionará únicamente en pleno con nueve integrantes en lugar de 11 y ya no en salas.
Además, para que la SCJN pueda emitir declaratorias generales de inconstitucionalidad que sean vinculantes en todo el país, será necesario obtener una mayoría calificada de seis votos.