-La presidenta asegura que no se detendrán obras públicas ni programas sociales, pese a la reducción del déficit fiscal-
Nacional.- Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el déficit fiscal de México cerrará este año en un 6%, con una reducción planeada al 3.5% para 2025. Aseguró que este ajuste no implicará aumentos de impuestos ni afectará la inversión. en obras públicas ni en los programas sociales.
El déficit fiscal, explicó, se refiere al desequilibrio entre los gastos del gobierno y sus ingresos, y su reducción es clave para mantener la estabilidad económica del país. “Va a haber una reducción importante y los mercados lo van a recibir bien”, afirmó Sheinbaum. La meta de reducir el déficit fiscal al 3,5% ha sido recibida con optimismo en los sectores financieros, pues representa un paso hacia una mayor disciplina presupuestaria.
A pesar de la reducción del déficit fiscal, la presidenta fue enfática en que la obra pública no se detendrá. Recordó que durante el mandato de Andrés Manuel López Obrador, la inversión pública en infraestructura detonó también la inversión privada y generó empleos. “No habrá aumento de impuestos, y se reducirá de manera importante el déficit fiscal”, reiteró Sheinbaum, quien considera que el equilibrio entre inversión y estabilidad fiscal es fundamental.
Sheinbaum también destacó la importancia de los programas sociales, mencionando que ya hay 400 mil nuevos adultos mayores que cumplen los requisitos para recibir su pensión, lo que implica una mayor demanda de recursos, pero que no afectará el compromiso de reducir el déficit fiscal.
El enfoque en reducir el déficit fiscal al 3.5% fue repetido por Sheinbaum en varias ocasiones, subrayando que se trata de una meta ambiciosa pero alcanzable. “El objetivo es llegar a 3,5%, o si no, rondaría en ese porcentaje”, señaló, dejando claro que esta cifra será un pilar en su estrategia económica para los próximos años.
La combinación de una disminución significativa del déficit fiscal con la continuidad en las obras públicas y programas sociales es la fórmula que Sheinbaum propone para mantener el crecimiento económico sin sacrificar la estabilidad financiera.